Comunicado de la Real Academia sobre el nuevo trasvase Tajo-Segura
En las próximas semanas se van a trasvasar desde el Tajo al Segura nada más y nada menos que 174 hectómetros cúbicos, como consecuencia de la aplicación estricta de lo establecido en el vigente memorándum que regula los caudales a trasvasar desde la cabecera del Tajo a la cuenca del Segura en función de las existencias conjuntas en Entrepeñas y Buendía a comienzos de cada mes.
Esta brutal cantidad es la suma de los trasvases aprobados en los últimos meses y que, debido a obras de mantenimiento en las infraestructuras del Trasvase, no se han realizado mes a mes, generando un inconcebible “saldo de agua a trasvasar” que atenta contra la lógica y que volverá a dejar a los embalses de cabecera y al resto del río en una situación crítica.
Es importante recalcar que, en estos meses en los que no se han efectuado trasvases por las mencionadas obras y pese a las abundantes lluvias y nevadas que se han producido, el nivel de los embalses de cabecera ha ascendido únicamente hasta algo más del 30 % de su capacidad. Resulta inconcebible que puedan considerarse excedentes trasvasables las aguas a derivar con ese porcentaje de almacenamiento y máxime encontrándose el curso del Tajo en un estado de degradación tan grave, tanto por la contaminación aguas abajo de la desembocadura del Jarama, como por la ausencia de un régimen natural de caudales con crecidas y estiajes, debido a la gestión del río, concebido como un depósito de agua y no como un recurso natural y cultural, ante la pasividad y permisividad de la Confederación Hidrográfica del Tajo.
Desde la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo queremos volver a incidir en las tremendas consecuencias del Trasvase en aspectos no solo ambientales sino también culturales –y en este sentido nuestra posición debe ser si cabe más clara– pues la falta de agua, su estado de contaminación y la ausencia de un régimen fluvial natural afectan a la conservación del paisaje cultural ligado al Tajo, degradándolo hasta límites inaceptables. Queremos asimismo denunciar la tremenda injusticia e insostenibilidad del actual marco normativo que regula el Trasvase Tajo-Segura. Una normativa fuera de toda lógica en un mundo que camina supuestamente hacia la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, en los que la gestión del agua, de los ríos y de los paisajes culturales teóricamente está enfocada en términos radicalmente opuestos.
La ciudadanía ha perdido la noción de la magnitud del expolio que supone el Trasvase, y es necesaria una labor didáctica que ayude a comprender cuánta agua es 174 hectómetros cúbicos, cantidad que va a trasvasarse en las próximas semanas
- Son 174.000 millones de litros. Párense a asumir la cifra: ¡174.000 millones de litros!
- Equivalen a dar una garrafa de casi 25 litros a cada habitante del planeta Tierra.
- Equivalen a 30 años de consumo de una ciudad como Toledo o como Talavera de la Reina. ¡30 años!
Mientras tanto, los niños de la cuenca del Tajo reciben cada día en la escuela mensajes sobre la importancia del ahorro de agua, como cerrar el grifo al lavarse los dientes o ducharse en vez de bañarse. En paralelo, ven cómo el río que pasa por su ciudad huele mal, está repleto de espumas o tienen prohibido bañarse en él. Sin embargo, nadie les dice que su esfuerzo es en vano mientras de manera legal pero injusta su río sea esquilmado por el Trasvase.
Mediante este comunicado, queremos volver a denunciar la situación del río –no en vano ocupa el número 1 en nuestra Lista de Patrimonio en Peligro desde su creación en 2016– y mostrar nuestro rechazo al actual marco normativo, exigir el cumplimiento de las sentencias que obligan al establecimiento de unos caudales dignos y unos regímenes naturales del río y denunciar la grave incoherencia de esta situación en los actuales tiempos en los que los Objetivos de Desarrollo Sostenible marcan el rumbo de los países que se dicen civilizados.
Deberían ceñirse a su Objeto como Academia.
«El objeto de esta Real Academia es cultivar las realizaciones artísticas, históricas y literarias, así como, preferentemente, investigar, ilustrar y divulgar el arte y la historia de Toledo y de su provincia.»
El rigor académico es imprescindible.
Un saludo
Creo que la Real Academia necesita incorporar urgentemente a alguien de ciencias para poder decir estas cosas sin hacer el ridículo.