El pasado día 21 se trasladó a la Residencia Sacerdotal de Toledo un grupo de Académicos, presidido por su Director, con el fin de hacer entrega del nombramiento de Académico Honorario Supernumerario a José Carlos Gómez-Menor Fuentes.
Sacerdote, licenciado en Filosofía y Letras por la Universidad Pontificia de Salamanca, ex Director del Secretariado Diocesano de Arte Sacro, ex Capellán de la capilla de San José, de Toledo, Académico Correspondiente en Toledo de las Reales Academias de la Historia y de Bellas Artes de San Fernando, el cardenal de Toledo D. Antonio Cañizares Llovera le había concedido el año 2008 el Título de Canónigo Honorario de la S.I.C.P. de Toledo. En el mes de octubre de este año habría cumplido los cincuenta años de pertenencia a la Real Academia como Numerario. Experto en las figuras de Santa Teresa de Jesús y San Juan de la Cruz, su discurso de ingreso llevó por título El linaje toledano de Sta. Teresa y San Juan de la Cruz.
De nuestro nuevo Académico Numerario dijo Clemente Palencia en el discurso de recepción que tuvo lugar en 1972: Transcurre su niñez en aquella toledana librería de don Rafael Gómez-Menor, su padre, que yo llamaría «imprenta humanística»: allí conocí y saludé por primera vez al ilustre investigador don Francisco de Borja San Román, que corregía las pruebas de un estudio sobre el humanista Alvar Gómez de Castro, el primer biógrafo del Cardenal Cisneros,
el que dejó en bellísimo latín el relato milagroso del enterramiento del Señor de Orgaz a los pies del famoso cuadro del Greco en la iglesia de Santo Tomé. En esa imprenta se editaron delicadas ediciones de nuestros clásicos. Alumno aventajado de nuestro Instituto de Enseñanza Media, se orienta después hacia la Facultad de Filosofía y Letras de Madrid, para más tarde dedicarse al sublime ministerio sacerdotal. Su vocación de investigador se manifiesta aun en ambiente rural, como lo prueba su interesante monografía sobre «Cervera de los Montes», en los primeros pasos de su vida pastoral.
Trasladado a Toledo, comienza su paciente labor de investigación recorriendo los distintos archivos de la Imperial Ciudad y preparando un interesante acopio de documentos que han venido a aclarar datos de capital interés sobre la vida de nuestros grandes artistas. Su estudio «Juan Correa de Vivar», en la revista «Archivo Español de Arte» del C.S.I.C. (Instituto «Diego Velázquez»), viene a esclarecernos preciosos datos sobre este interesante pintor renacentista de escuela toledana, sucesor, con Comontes, de Juan de Borgoña, y nos proporciona noticias valiosas sobre su actividad artística. Otro tanto ha hecho con la vida y el arte del interesante Blas de Prado.
Cuando se celebró la Exposición Diocesana de Arte Antiguo en el Palacio de Fuensalida publicó su «Catálogo», gracias al cual tenemos nueva noticia de obras debidas a pintores de la categoría de Zacarías González Velázquez o de Juan Sánchez Cotán.
Es de gran valor la documentación que da más tarde sobre la personalidad de Jerónima de las Cuevas y sobre el Greco. Su hallazgo de tres escrituras de Garcilaso hasta hoy desconocidas nos permite llegar a tener conocimiento sobre Juan de Aguirre, criado del caballero toledano y de doña Elena de Zúñiga, la esposa del poeta, cuya dote donada por el Rey de Portugal se encarga de cobrar; del mercader genovés Juan Antonio Pinelo, banquero del poeta, etc. Su completísimo estudio titulado «La Antigua Tierra de Talavera» nos proporciona importantes detalles sobre la jurisdicción medieval de aquella villa toledana. Últimamente, en «Cuadernos de Historia de la Medicina Española», de Salamanca, termina de aparecer «Algunos datos documentales sobre médicos toledanos del siglo XVI».
Creo que he reseñado nada más que una pequeña parte de su labor investigadora: nos llevaría mucho tiempo completar la lista y comentar la importancia de ella.